Para mí la pastelería es sinónimo de celebración. De las grandes cuando hay que brindar por las buenas noticias. Y de las pequeñas, las de los reencuentros y las alegrías del día a día.
Decidí empezar este proyecto para compartir mi pasión y crear un espacio para seguir celebrando la vida. Con los nuestros y con un buen dulce al lado. Y es que la pastelería es una respuesta para lo que sea. Un bocado y todo mejora. Todo se vuelve más bonito y alegre. Y es precisamente esto lo que queremos que sientas en nuestro espacio.
SOMOS UNA PASTELERÍA HANDMADE UBICADA EN VILADECANS DONDE TE PUEDES DAR EL CAPRICHO QUE TE MERECES, UN HOMENAJE DIRECTO PARA TU BODY. PORQUE NO HAY PROBLEMA QUE UN PASTEL NO PUEDA SOLUCIONAR. AQUÍ SE TARTA DE SER FELIZ.